La Ley de Segunda Oportunidad ha logrado cancelar todas las deudas de una mujer de La Orotava. Viuda y con incapacidad permanente, ha visto canceladas sus deudas, que ascendían a más de 73.000 euros, y ha podido empezar de nuevo.
María Dorta explica que las deudas comenzaron tras el fallecimiento de su marido. Esto se debe a que, a pesar de renunciar a la herencia y abandonar su vivienda, tuvo que continuar pagándola, debido a desavenencias familiares. A este hecho se suma que, en 2018, María se sometió a una intervención quirúrgica a causa de problemas cervicales. Posteriormente le declararon la incapacidad permanente, al no remitir su dolencia.
Este cambio de circunstancia supuso una drástica reducción de sus ingresos económicos. Por ello, María se vio en la necesidad de solicitar distintos productos financieros para poder afrontar sus gastos vitales.
La pensión que obtenía en concepto de incapacidad era insuficiente para hacer frente a las obligaciones que ya había contraído, e intentó, sin éxito, llegar a acuerdos de pago con sus acreedores.
El caso
La asesora de Canarias Sin Deuda, Ana Beatriz Nunes explica que cumplía con todos los requisitos para acogerse a la ley. Además, apunta que su colaboración «ha sido primordial para llevar a cabo todo el proceso. Este culmina, por fin, con la cancelación de todas sus deudas”.
El abogado Daniel Corredera comenta que este tipo de casos “se dan cada vez más, puesto que las personas confían demasiado en su estabilidad laboral a la hora de pedir créditos y financiación externa. Esto puede llegar a ‘torcerse’ cuando pierden el trabajo, entran en ERTE o sufren un imprevisto que implica pérdida de ingresos o nuevos gastos a los que hacer frente”.
María Dorta señala que el proceso lo vivió “con ilusión y con ganas”. A las personas que se plantean comenzar con la Ley de Segunda Oportunidad les anima a dar el paso y a que “no lo duden nunca” ya que esta ley le ha “cambiado la vida”.
