Una vecina de Santa Lucía de Tirajana logra cancelar más de 65.000 euros de deudas por tarjetas revolving con La Ley de Segunda Oportunidad. M.B. desde siempre, ha tenido que ayudar a su madre y su núcleo familiar, que son 10 hermanos, muchos de ellos en situación de desempleo, contribuyendo con el pago de alimentos y demás gastos básicos. Al empeorar su situación económica tuvo que recurrir a tarjetas de crédito en su modalidad “revolving” para fraccionar los pagos. Sin embargo, no era consciente de los altos intereses que iba acumulando.
A su vez, para hacer frente al pago de las cuotas de dichas tarjetas, recurrió a financiación externa y a préstamos personales. Acumuló, así, progresivamente, más deudas que le llevaron a un círculo de endeudamiento que le impedía llegar a final de mes.
El responsable de la oficina de Canarias Sin Deuda en Las Palmas, Samuel Díaz, explica que “el caso de M.B. describe la clásica espiral de endeudamiento que vemos reflejada en muchos casos. Cuando la necesidad de disponer de dinero para afrontar gastos básicos lleva a esta persona a contraer más deudas intentando sufragar las primeras. Al final, se llega a una situación que ya es del todo insostenible. Todo esto fruto del desconocimiento, ya que la consecuencia directa de dicho uso es más deudas por tarjetas revolving durante mucho más tiempo”.
En este caso, además, según detalla el abogado Samuel Díaz “ha sido posible que M.B pueda mantener el vehículo en propiedad. Una circunstancia que es fundamental para poder desarrollar su trabajo en el sector de la hostelería y seguir adelante en su nueva vida”.
Las condiciones imprescindibles para poder recurrir a esta ley son ser persona física; no haber cometido delitos socioeconómicos o contra el patrimonio en los últimos 10 años y haber actuado de buena fe, ya que se debe tener bien claro que la persona endeudada, hasta el último momento, ha hecho lo posible por pagar sus deudas. Tras estudiar el caso y comprobar que cumplía todos los requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, los abogados de Canarias Sin Deuda ayudaron a M.B. a iniciar el procedimiento, reuniendo y presentando toda la documentación.
M.B. explica que la Ley de Segunda Oportunidad le ha permitido comenzar una nueva vida. «No me creía que esto pudiera ocurrirme a mí, pero aquí estamos por fin», alega.